RIIS UNIVALLE. Jul.-Dic. 19(45), 2023; ISSN: 2075-6208
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Carta al Editor.
Carta al editor Letter to the editor
REVISTA DE INVESTIGACIÓN E INFORMACIÓN EN SALUD
RIIS UNIVALLE. Jul-Dic.2023; ISSN: 2075-6208
revistas.riis@revistas.univalle.edu
Derechos de autor 2023 Eduardo Saadi Neto1 Soa S. Aliss Sabath 2
Esta obra está bajo una licencia internacional Creative Commons Atribución 4.0.
Filiación y grado académico
1. Interno de medicina de la Universidad
Privada del Valle. esaadineto@gmail.
com.
2. Estudiante de 5to año de medicina
de la Universidad Privada del Valle.
ass2019223@est.univalle.edu.
Fuentes de nanciamiento
La investigación fue realizada con
recursos propios; sin embargo,
el análisis estadístico a cargo de
la Universidad Privada del Valle,
Cochabamba, Bolivia.
Conictos de interés
Los autores declaran no tener conicto
de interés.
Recibido:07/10/2023
Revisado:07/10/2023
Aceptado:07/12/2023
Citar como
RSaadi Neto, E., & Aliss Sabath ,
S. S. Manejo inicial del paciente
traumatizado en emergencias. Revista
De Investigación E Información
En Salud, 19(45). https://doi.
org/10.52428/20756208.v18i45.923
Correspondencia
Eduardo Saadi Neto
Cochabamba, Bolivia.
+591 76948801
esaadineto@gmail.com
DOI: https://doi.org/10.52428/20756208.v18i45.1039
Carta al editor
Letter to editor
Eduardo Saadi Neto1 Soa S. Aliss Sabath2
Palabras clave: Emergencias, paciente traumatizado, vía aérea.
Keywords: Airway, emergencies, trauma patient.
Sr. Editor:
El conocimiento sobre cómo manejar a un paciente traumatizado se vuelve
un requisito obligatorio para todo el personal de salud que trabaja en un
servicio de emergencias. Un ejemplo de esto, es que este tipo de evento
es la principal causa de muerte en adultos jóvenes en los Estados Unidos,
representando el 10 % de todas las muertes (1). La mayoría de estas
muertes ocurren en el lugar del accidente o en las primeras 4 horas después
de acudir a una sala de emergencias (2). Las lesiones presentadas pueden
variar en relación directa con el mecanismo del trauma.
En el momento de ingreso del paciente, se debe realizar la evaluación
primaria, que se lleva a cabo mediante las siglas ABCDE (3):
Airway (Vía aérea): Evaluación y protección de la vía aérea junto
con la estabilización de la columna cervical.
Breathing (Respiración): Evaluación de la mecánica ventilatoria.
Circulation (Circulación): Control de hemorragias y perfusión
orgánica.
Disability (Incapacidad): Examen neurológico.
Exposure (Exposición): Exposición del paciente, seguido de
cuidados contra la hipotermia.
Cada uno de estos puntos presenta hallazgos que pueden suponer un riesgo
para la vida, y se realizará el tratamiento inmediato de los mismos (por
ejemplo, obstrucción de la vía aérea, neumotórax a tensión).
A. Es importante destacar la protección de la vía aérea, por lo que se
recomienda realizar la secuencia de intubación de rápida. Esta técnica
implica la preoxigenación del paciente, seguido del uso de un fármaco de
inducción (Propofol, ketamina, etomidato) y de un relajante neuromuscular
(succinilcolina, rocuronio). El uso de esta técnica ha demostrado un 90%
de éxito en el primer intento (4). También se sugiere utilizar la técnica del
3-3-2 para valorar rápidamente la vía aérea.
B. Valorar la mecánica ventilatoria y la oxigenación del paciente a través
del oxímetro de pulso, buscar la presencia de lesiones en la pared costal,
alteración o ausencia de los ruidos respiratorios a la auscultación; en caso
de un neumotórax, se realizará la descompresión mediante toracostomía
con aguja en el quinto espacio intercostal a la altura de la línea media axilar
(5). En presencia de un paciente inestable debido a hemotórax, se opta por
el uso de un tubo de tórax (Francés), Nro. 24 al 28 (3).
C. La hemorragia se presenta como la principal causa de muerte prevenible
en pacientes traumatizados, llevándolos al estado de shock, ya que no
presenta signos claros hasta una pérdida del 30 % del volumen (6). Por lo
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tanto, se podrían utilizar el índice de shock (frecuencia cardíaca/presión sistólica), con un valor normal de
0,5 a 0.7; un resultado de 0.9 presenta un aumento de la mortalidad (7). Se recomienda la colocación de dos
vías periféricas de gran calibre para el uso de productos sanguíneos, soluciones y un catéter urinario para el
control de la perfusión. Para recuperar el volumen perdido se recomienda la transfusión sanguínea (3). En
relación al uso de soluciones, inicialmente se usarán isotónicas como ringer lactato; en caso de patologías
especícas, se podría cambiar a soluciones hipertónicas en pacientes con traumatismo craneoencefálico
(8). Además, se sugiere el uso de ácido tranexámico dentro de las tres primeras horas, lo cual muestra una
disminución en la mortalidad (9).
D. El examen neurológico puede ser realizado a través de la escala de coma de glasgow, que toma en cuenta
la respuesta ocular, verbal y motora; la escala de FOUR, que engloba la respuesta ocular, motora, reejos
troncales y respiración; o la escala AVDN en el ambiente de emergencias, que signica si el paciente está
Alerta, Verbal, si siente y localiza el Dolor y si No responde. Posteriormente, se pueden determinar lesiones
morfológicas a través de estudios de imagen.
E. La exposición de un paciente es importante debido a las lesiones que se podrían omitir al estar en
áreas no visibles. Posteriormente, es necesario el calentamiento del paciente, ya que la hipotermia puede
contribuir a la aparición de complicaciones sistémicas, como las coagulopatías (10).
No se debe olvidar la importancia de los estudios complementarios, como la radiografía portátil, la ecograa-
FAST, que presenta una mayor sensibilidad para detectar neumotórax en comparación con la radiografía;
48,8 % vs 20,9 % (11). Además, la tomografía computarizada, electrocardiograma y laboratorios como el
lactato sérico y el décit de bases en la gasometría que se correlacionan con la mortalidad (12).
Después de la evaluación primaria, se determinará si el paciente requiere una intervención quirúrgica de
emergencia o se procederá a la evaluación secundaria, que consiste en una revisión detallada por sistemas
y el uso de exámenes complementarios si es necesario. Con esta pequeña lectura creemos que se pueden
realizar mas estudios locales para reejar la importancia de la misma y preparar a mas estudiantes o
profesionales en la atención de pacientes críticos.
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